Puede que sea lo de siempre, puede que sea lo que siempre hemos oído, pero nuestro mar
Mediterráneo es rico en recursos y sorpresas, lleno de diversidad cultural a su paso. Al menos una
vez en la vida, sería útil viajar por cruceros mediterraneo a lo largo de ella para sumergirse plenamente en el alma de estas
cálidas aguas de mil sombras.
Nápoles
La mejor época para realizar un crucero por el Mediterráneo es sin duda el verano, de junio a
septiembre, cuando las lluvias son escasas, el tiempo es soleado y las temperaturas son
agradables, aunque durante este período la aglomeración de barcos y lugares turísticos está
aumentando bruscamente y puede ser difícil disfrutar del crucero como tiempo de vacaciones y
descanso.
Muchas familias con niños en los últimos años están optando por un crucero de vacaciones, por lo
que el hecho de poder empezar en las semanas en que las escuelas están abiertas, en la primera
quincena de junio y en el segundo de septiembre, puede ser propicio para encontrar más
tranquilidad mientras navegan.
Considere que las temperaturas durante el mes de agosto, en ciudades como Atenas o Estambul,
podrían superar los 40°C y hacer de su visita un verdadero infierno. Durante la navegación, en
cambio, la brisa marina le ayudará a resistir las temperaturas más altas en los momentos más
calurosos del verano.
Los meses de abril, mayo y octubre son ideales para todas las visitas y excursiones a los puertos
donde atracarán los cruceros si no aspira a hacer pequeñas pausas bajo el sol, difíciles dadas las
temperaturas de primavera y algunos días de lluvia más que en pleno verano. La ventaja es que en
estos meses los barcos están menos concurridos y sus vacaciones pueden ser mucho más
agradables. Por supuesto, encontrará los precios más altos durante la temporada alta, entre julio y
agosto.
Así que, para sus próximas vacaciones, embarque y salga a descubrir los colores de nuestro
Mediterráneo!