Reflexión cristiana| El primer camino de distinguir entre el verdadero Cristo y los falsos Cristos: Distinguiendo las obras que hacen {1}

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Reflexión cristiana | El primer camino de distinguir entre el verdadero Cristo y los falsos Cristos: Distinguiendo las obras que hacen {1}

Dios dice: “Dios mismo viene a iniciar una era y también viene a poner fin a esa era. El hombre es incapaz de realizar la obra de comenzar una era y concluirla. Si Jesús no hubiera llevado a su fin la obra de Jehová después de haber venido, esto habría demostrado que era meramente un hombre y que no fue capaz de representar a Dios. Precisamente porque Jesús vino y acabó la obra de Jehová, siguió a partir de esta iniciando la suya propia, una nueva, esto demuestra que esta fue una nueva era y que Jesús era Dios mismo. […] La historia progresa siempre hacia adelante, y la obra de Dios también. Para que Su plan de gestión de seis mil años alcance su fin, debe seguir progresando. Cada día, cada año, Él debe realizar obra nueva; debe abrir nuevas sendas, iniciar nuevas eras, iniciar obra nueva y mayor, […]”.

“Si durante la época actual emerge una persona capaz de exhibir señales y maravillas, echar fuera demonios, sanar a los enfermos y llevar a cabo muchos milagros, y si esta persona declara ser Jesús que ha venido, sería la falsificación por parte de espíritus malos y su imitación de Jesús. ¡Recuerda esto! Dios no repite la misma obra. La etapa de la obra de Jesús ya ha sido completada, y Dios nunca más la acometerá. […] Si durante los últimos días, Dios siguiera exhibiendo señales y maravillas, echara fuera demonios y sanara a los enfermos —si hiciera exactamente lo mismo que Jesús—, Dios estaría repitiendo la misma obra, y la de Jesús no tendría significado ni valor. Así pues, Dios lleva a cabo una etapa de la obra en cada era. Una vez completada cada etapa de la obra, los espíritus malignos la imitan pronto, y después de que Satanás empiece a pisarle los talones a Dios, este cambia a un método diferente. Una vez que Dios ha completado una etapa de Su obra, los espíritus malignos la imitan. Debes tener claro esto”.

A partir de la Palabra de Dios podemos ver que Dios siempre es nuevo y nunca viejo y Él nunca repite la misma obra, y Su obra progresa siempre hacia adelante. Por eso, cada vez que Cristo venga a obra, abrirá una nueva era y finalizará la vieja de acuerdo con las necesidades humanas. Como cuando el Señor Jesús vino a obrar, no repitió la obra en la Era de la Ley, sino que comenzó la Era de la Gracia sobre las bases de la obra realizada por Jehová Dios, expresando el camino del arrepentimiento, dando las abundantes gracias a la humanidad, y finalmente fue clavado en la cruz por el hombre. Al aceptar la obra redentora del Señor Jesús, el hombre era perdonado de sus pecados, liberado de la esclavitud y el control de la ley, y desde entonces podía adorar a Dios libremente. Se puede ver que la obra de la Era de la Gracia salvó al hombre de las reglas de la ley, y la práctica del hombre era más elevada que la de la Era de la Ley, y el Señor Jesús llevó al hombre a una esfera más elevada y a una nueva era. Si el Señor Jesús viniera y hiciera la obra de la Era de la Ley, entonces la obra de Dios solo podría permanecer en la Era de la Ley, y las personas que siguieron a Jehová Dios solo podrían ser condenadas y ejecutadas porque no podrían cumplir la ley. Del mismo modo, en el Apocalipsis se profetiza que el Señor vendrá a hablar nuevamente y nos guiará a comprender todas las verdades. Si la obra que el Señor vuelve a realizar en los últimos días fuera igual que la que Él sanó a los enfermos y echó fuera demonios, y fue clavado en la cruz en la Era de la Gracia, la obra de Dios no podría avanzar hacia adelante, ni llevar al hombre a un nivel superior, y el hombre siempre viviría en el ciclo de pecar y confesar y no podría escapar de la esclavitud del pecado. Por lo tanto, cuando venga el Señor en los últimos días, Él no repetirá la obra de la Era de la Gracia, sino que hará una obra más nueva y elevada para abrir una nueva era y traer nuevas prácticas al hombre.

Pero, debido a que la esencia de los falsos Cristos es un espíritu maligno, y ellos no pueden hacer la obra de Dios en absoluto, por lo tanto, no pueden hacer la obra de abrir una nueva era ni poner fin a una vieja era, mucho menos señalar las nuevas prácticas al hombre. Esto es hecho.

El Señor Jesús dijo: “Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas, y mostrarán grandes señales y prodigios, para así engañar, de ser posible, aun a los escogidos” (Mateo 24:24). Esto muestra que el característica principal de los falsos Cristos para engañar a la gente es realizar cosas señales y maravillas y imitar la obra que el Señor Jesús llevó a cabo. Pero los falsos Cristos solo pueden mostrar señales y prodigios simples y nunca pueden hacer los señales y prodigios importantes como calmar el viento y el mar con una palabra, resucitar a un muerto con una palabra, alimentar a 5 000 personas con cinco panes y dos peces, dominar la vida y la muerte del hombre y todo el universo. De esto podemos ver que como los falsos Cristos no tienen la autoridad y el poder de Dios, solo pueden mostrar señales y milagros simples para engañar y perjudicar al hombre, y no pueden hacer la obra de Dios en absoluto. Por lo tanto, si alguien ahora emerge una persona que exhiba señales y maravillas y declare ser Jesús, no hay duda de que sería el Cristo falso, la personificación de espíritus malos. La próxima vez continuaremos comunicándonos el segundo camino de distinguir entre el verdadero Cristo y los falsos Cristos.  Si tienes alguna pregunta, por favor déjanos tus mensajes.

Continuará…

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Scripture quotations taken from www.LBLA.com . Copyright by The Lockman Foundation.

 

Reflexión cristiana| El primer camino de distinguir entre el verdadero Cristo y los falsos Cristos: Distinguiendo las obras que hacen {1}ultima modifica: 2020-02-05T16:13:14+01:00da conoceradios