Música evangélica | Ten una relación normal con Dios para ser perfeccionado
Música evangélica | Ten una relación normal con Dios para ser perfeccionado
I
Sólo cuando tu relación con Dios sea normal,
podrás ser perfeccionado por Él,
y la disciplina, el refinamiento de Dios
y Su poda tendrán el efecto deseado.
Eres capaz de tener un lugar en tu corazón para Dios,
de no buscar beneficiarte y no pensar en el futuro.
Es mejor la carga del peso de entrar en la vida,
entregarse a la obra de Dios y a Su verdad.
Así, lo que buscas no está mal
y tienes una relación normal con Dios.
El primer paso de tu viaje espiritual
es arreglar tu relación con Dios.
Aunque el destino del hombre está en manos de Dios,
es Su orden y no se puede cambiar,
que puedas ser perfeccionado o que Dios te gane
depende de si tienes o no una relación normal con Dios.
II
Quizás hay parte de ti que es débil o desobediente,
pero si tu actitud y motivaciones son correctas,
si has rectificado tu relación con Dios,
entonces Él te capacitará y perfeccionará.
El primer paso de tu viaje espiritual
es arreglar tu relación con Dios.
Aunque el destino del hombre está en manos de Dios,
es Su orden y no se puede cambiar,
que puedas ser perfeccionado o que Dios te gane
depende de si tienes o no una relación normal con Dios.
III
Si no tienes una buena relación con Dios,
si actúas sólo para tu familia o tu carne,
no importa cuán duro trabajes,
no será ni valdrá nada.
Si tu relación con Dios es normal,
eso es bueno y todo lo demás sucederá y saldrá bien.
Dios sólo se fija en si tu forma de ver
tu fe en Dios es correcta:
en quién crees y por el bien de quiénes crees,
y la razón por la que crees.
Si eres capaz de ver, de ver claramente
y rectificar tu práctica,
irás por el buen camino en tu vida.
El primer paso de tu viaje espiritual
es arreglar tu relación con Dios.
Aunque el destino del hombre está en manos de Dios,
es Su orden y no se puede cambiar,
que puedas ser perfeccionado o que Dios te gane
depende de si tienes o no una relación normal con Dios,
una relación normal con Dios,
una relación normal con Dios.
De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”
La devoción espiritual es muy importante para todos los cristianos, pero ¿cómo hacer devociones espirituales para ser más íntimos con Dios? Hoy vamos a buscar la respuesta en la Palabra de Dios.
Dios dice: “Cuanto más vivas una vida espiritual, más ocupado estará tu corazón por las palabras de Dios, siempre preocupado por estos asuntos y siempre llevando esta carga. Después de eso, puedes revelar tu verdad más interna a Dios a través de tu vida espiritual, decirle lo que quieres hacer, lo que has estado pensando, tu entendimiento de la palabra de Dios y tus propios puntos de vista acerca de ella. ¡No escondas nada; ni siquiera un poco! Practica el comunicarle las palabras de tu corazón a Dios, decirle la verdad, y no dudar en expresar lo que hay en tu corazón. Cuanto más hagas esto, más sentirás el encanto de Dios, y tu corazón se verá cada vez más atraído hacia Dios. Cuando esto acontezca, sentirás que Dios es más querido para ti que cualquier otra persona. Pase lo que pase, nunca te apartarás de Su lado. Si practicas esta clase de devocional espiritual a diario y no lo sacas de tu mente, sino que lo tratas como tu llamamiento en la vida, la palabra de Dios ocupará tu corazón. Esto es lo que significa ser tocado por el Espíritu Santo. Será como si Dios hubiera poseído siempre tu corazón, como si siempre hubiera habido amor en tu corazón. Nadie puede quitarte esto. Cuando esto ocurra, Dios vivirá realmente en ti, y tendrá un lugar en tu corazón”.
De este pasaje, vemos que para tener la verdadera vida espiritual debemos estar en silencio delante de Dios, leyendo cuidadosamente la Palabra de Dios, tratando de averiguar el verdadero significado de la Palabra de Dios, contando nuestras verdaderas dificultades a Dios y practicando hablar a Dios las palabras que hay dentro de nuestro corazón. Cuando a menudo tengamos tal vida espiritual, podremos entender cada vez más la voluntad de Dios y Sus requisitos, y el conocimiento que tenemos de Dios irá elevando, y poco a poco, nuestro corazón estará más cerca a Dios, ¡entonces nuestra relación con Dios se volverá más y más cercana!
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