El Señor ha regresado, ¿cómo debemos tratar la segunda venida de Cristo?
En los últimos años, ha habido más y más desastres como terremotos, hambrunas y plagas, etc. Las profecías sobre el regreso del Señor en la Biblia básicamente se han cumplido. Muchos hermanos y hermanas que esperan la aparición del Señor han percibido que el Señor puede haber regresado. Pero ¿por qué todavía no hemos recibido el regreso del Señor? ¿Dónde está el Señor? ¿Cómo deberíamos buscar la aparición del Señor? Al hablar de este tema, hay algunas personas que piensan que el Señor no ha regresado, no hay necesidad de buscar, porque la Biblia dice: “Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre; y entonces todas las tribus de la tierra harán duelo, y verán al Hijo del Hombre que viene sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria” (Mateo 24:30). El Señor descenderá sobre una nube, a una escala gigante. Ahora esta escena aún no ha aparecido, lo que demuestra que el Señor no ha regresado.
Ahora existe dos puntos de vista diferentes. Entonces ¿ya ha regresado el Señor? ¿Cómo se aparecerá el Señor a la gente cuando regrese? ¿Podremos ver con seguridad la aparición de Dios y recibir al Señor si sólo estamos esperando que Él descienda sobre una nube? Hablaremos sobre estas preguntas.
¿Podemos ver realmente la aparición de Dios, esperando el descenso del Señor sobre una nube ?
Muchos hermanos y hermanas, según la escritura: “[…] Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, vendrá de la misma manera, tal como le habéis visto ir al cielo” (Hechos 1:11), creen que el Señor Jesús cuando resucitó y ascendió al cielo, se fue sobre una nube blanca, y cuando el Señor regrese otra vez también será con el cuerpo espiritual resucitado volviendo sobre una nube blanca. Si tan solo no ven la escena del Señor descendiendo sobre una nube, ya significa que el Señor todavía no ha regresado. ¿Pero nos atrevemos a garantizar que tal recepción es completamente acorde a la voluntad de Dios? Jehová Dios dice: “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos […] Porque como los cielos son más altos que la tierra, así mis caminos son más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos” (Isaías 55:8-9). La sabiduría de Dios es más alta que los cielos, ¿cómo podemos los seres humanos sondear la obra de Dios? Es imposible para nosotros definir cómo se aparecerá el Señor para obrar en los últimos días, así como la Biblia predijo que vendría el Mesía, pero vino el Señor Jesús, ¿esto nos lo hubiéramos podido imaginar? Los fariseos originales se convirtieron en personas que se resistieron a Dios porque eran demasiados arrogantes y mantenían sus propias nociones e imaginaciones. No importa cuán autoritario y poderoso sean las palabras y la obra del Señor Jesús, ellos todavía estipulan la obra de Dios de acuerdo con sus propias nociones e imaginaciones, pensando que el Mesía asumirá el poder, y seguramente deberá haber nacido en un palacio real con una apariencia majestuosa, así que vieron que el Señor Jesús era un judío ordinario, que Su nombre no era Mesía, y que tampoco nació en un palacio real, se negaron a aceptar la obra del Señor. Incluso se unieron al gobierno romano para crucificar al Señor Jesús en la cruz, finalmente fueron castigados por Dios. Pero no importa cómo los fariseos condenaron y resistieron al Señor, la aparición del Señor Jesús para realizar la obra es un hecho, y completó la obra de redención para toda la humanidad, por lo que si es o no la aparición de Dios para realizar la obra, no se basa en si el hombre acepta o no, sino más bien según el hecho de la obra de Dios. Ahora, los desastres ocurren con frecuencia, el regreso de Israel, y apareció la cuarta luna de sangre, lo que está cumpliendo la profecía del regreso del Señor, y todavía estamos esperando pasivamente que el Señor descienda sobre una nube, ¿también es fácil repetir el error de los fariseos de resistir al Señor? Como Dios dijo: “Os pregunto de nuevo: ¿No es extremadamente fácil para vosotros cometer los errores de los antiguos fariseos, dado que no tenéis el más mínimo entendimiento de Jesús? ¿Eres capaz de discernir el camino de la verdad? ¿Puedes garantizar realmente que no te opondrás a Cristo? ¿Eres capaz de seguir la obra del Espíritu Santo? Si no sabes si te opondrás o no a Cristo, entonces Yo digo que ya estás viviendo al filo de la muerte. Los que no conocían al Mesías fueron todos capaces de oponerse a Jesús, de rechazarlo, de difamarlo. Las personas que no entienden a Jesús son capaces de negarlo y vilipendiarlo. Además, son capaces de ver el regreso de Jesús como el engaño de Satanás, y más personas condenarán el retorno de Jesús a la carne. ¿No os asusta todo esto?”
En realidad, en cuanto a cómo regresa el Señor en los últimos días. Además de las profecías del descenso sobre una nube, también están las profecías secretas del descenso, como “Pero a medianoche se oyó un clamor: «¡Aquí está el novio! Salid a recibirlo»” (Mateo 25:6). “Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; guárdalo y arrepiéntete. Por tanto, si no velas, vendré como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti” (Apocalipsis 3:3). “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo” (Apocalipsis 3:20). En estas escrituras mencionan “Pero a medianoche se oyó un clamor” “como ladrón”, mostrando que el Señor regresará silenciosamente, descendiendo en secreto entre las personas, usando sus palabras para llamar a nuestras puertas. Si el Señor en los últimos días se nos aparece descendiendo sobre una nube, entonces, ¿cómo se cumplirán las profecías? Si el Señor descendiera sobre una nube, ¿seguiría tocando la puerta? Si el Señor aparece sobre una nube ante todos los que creen en Él, ninguna persona se atrevería a oponerse, y todos se postraran delante del Señor. Entonces la Biblia predijo que el Señor vendría nuevamente para realizar la obra de distinguir entre la cizaña y el trigo, las cabras y las ovejas, las vírgenes insensatas y las vírgenes prudentes. ¿Cómo lo logrará? Por lo tanto, no podemos guiarnos a partir de una o dos profecías, y definir que Dios regresará nuevamente a nosotros sobre una nube blanca en Su aparición. Así es fácil malentender la voluntad de Dios
Cómo encontrar la aparición de Dios
Antes dijimos, de acuerdo con las profecías de la Biblia, hay otra manera del regreso del Señor de forma secreta. Entonces ¿cómo podemos encontrar la aparición de Dios? El Señor Jesús dijo: “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen” (Juan 10:27). Y también en Apocalipsis se ha profetizado muchas veces: “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias” (Apocalipsis 2-3). A partir de las palabras del Señor y las profecías del Apocalipsis podemos ver que no podemos buscar pasivamente la aparición del Señor esperando a que el Señor descienda sobre una nube, debemos aprender a escuchar la voz de Dios y encontrar las palabras del Espíritu Santo a las iglesias. Leamos lo que dice la Palabra de Dios: “¿En dónde se aparece Dios? ¿Dónde están las huellas de Dios? ¿Habéis obtenido las respuestas? La respuesta de muchas personas sería esta: Dios se aparece entre los que lo siguen, y Sus huellas están entre nosotros; ¡así de sencillo! Cualquiera puede ofrecer una respuesta formulista, pero, ¿entendéis vosotros qué es la aparición de Dios, y cuáles son las huellas de Dios? La aparición de Dios se refiere a Su llegada personal a la tierra para hacer Su obra. Con Su propia identidad y carácter, y con Su método inherente, Él desciende entre los hombres para llevar a cabo la obra de comenzar una época y terminar otra. Esta clase de aparición no es una especie de ceremonia. No es una señal, un cuadro, un milagro o una gran visión y mucho menos una clase de proceso religioso. Es un hecho real y verdadero que se puede tocar y contemplar. Esta clase de aparición no es en aras de seguir un proceso o en aras de un trabajo a corto plazo; es, para ser más precisos, en aras de una etapa en la obra de Su plan de gestión”..
“Así, ya que estamos buscando las huellas de Dios, debemos buscar la voluntad de Dios, las palabras de Dios, las declaraciones de Dios, porque donde están las nuevas palabras de Dios, ahí está la voz de Dios, y donde están las huellas de Dios, ahí están los hechos de Dios. Donde está la expresión de Dios, ahí está la aparición de Dios, y donde está la aparición de Dios, ahí existe la verdad, el camino y la vida. Mientras buscabais las huellas de Dios, ignorasteis las palabras que dicen que ‘Dios es la verdad, el camino y la vida’. Y es que, cuando muchas personas reciben la verdad, no creen que han encontrado las huellas de Dios y mucho menos reconocen la aparición de Dios. ¡Qué error tan grave es ese! La aparición de Dios no se puede reconciliar con las nociones del hombre; mucho menos puede Dios aparecer por órdenes del hombre. Dios hace Sus propias elecciones y tiene Sus propios planes cuando hace Su obra; más aún, Él tiene Sus propios objetivos y Sus propios métodos. No es necesario que Él discuta con el hombre la obra que Él hace, ni que busque el consejo del hombre, ni mucho menos que les notifique de Su obra a cada una de las personas”.
En las palabras de Dios podemos entender que si queremos ver la aparición de Dios, hay que encontrar los pasos de Dios, y sobre todo debemos buscar la voz de Dios. En el pasado, pensábamos que ver la aparición de Dios significaba ver al Espíritu del Señor apareciendo repentinamente sobre una nube blanca hacia nosotros. De hecho, la aparición de Dios hacia nosotros no es una señal, ni tampoco aparece brevemente a las personas, sino descenderá Él mismo entre las personas para realizar la obra de salvación de la humanidad, para poner fin a la vieja era, concediendo la verdad a las personas y conduciendo a la gente a la nueva era. Por lo tanto, si encontramos las nuevas palabras y declaraciones de Dios, significa haber escuchado la voz de Dios, y haber visto la aparición de Dios. Al igual que cuando el Señor Jesús apareció para realizar la obra, puso fin a la Era de la Ley, abrió una nueva era, publicó las palabras del arrepentimiento, enseñó a las personas a confesar sus pecados y arrepentirse, a tolerar y a amar al enemigo, etc., y también reveló los misterios del reino de los cielos, las condiciones para entrar al reino de los cielos, etc., como: “[…] Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” (Mateo 4:17). “No todo el que me dice: «Señor, Señor», entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7:21). Todas estas palabras se refieren a cómo debemos entrar en el reino de los cielos. Al escucharlo, es particularmente esotérico, tiene autoridad y poder, no puede ser hablado por un ser humano, sino que ha sido publicado por Dios encarnado en la tierra. Aquellos que escucharon la predicación del Señor Jesús y reconocieron la voz de Dios y aceptaron la obra del Señor Jesús vieron la aparición de Dios y siguieron los pasos de Dios. Y aquellos que obstinadamente guardan la ley y solo esperan que venga el Mesías, escucharon las palabras del Señor Jesús y vieron los milagros del Señor Jesús, no admitieron que era la aparición de Dios. En cambio, juzgaron y condenaron al Señor Jesús, diciendo que habló las palabras arrogantes y que expulsó a los demonios por el poder de Belcebú. Estas personas no reconocieron la voz de Dios, como unas vírgenes insensatas, serán eliminadas por Dios. Por lo tanto, cuando recibimos la aparición del Señor, lo más importante es escuchar con atención la voz de Dios. El Señor Jesús había predicho hace mucho tiempo que anunciaría la verdad cuando regresara. como: “Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis soportar. Pero cuando Él, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oiga, y os hará saber lo que habrá de venir” (Juan 16:12-13). “El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene quien lo juzgue; la palabra que he hablado, esa lo juzgará en el día final” (Juan 12:48). Y Juan 17:17 dice: “Santifícalos en la verdad; tu palabra es verdad”. Y también 1 Pedro 4:17 dice: “Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios […]”. De estas escrituras, podemos ver que el Señor regresará nuevamente para publicar más verdades que la Era de la Gracia según nuestras necesidades, es decir publicará “[…] lo que el Espíritu dice a las iglesias” y hará la obra del juicio empezando por la casa de Dios, usando la verdad que publicará para purificar nuestras corrupciones, liberarnos de la esclavitud del pecado y llegar a la purificación para entrar al reino de Dios. Por lo tanto, tenemos que recibir la aparición del Señor, y debemos de buscar las palabras de la iglesia indicada por el Espíritu Santo.
Dios ha aparecido para obrar, ¿habéis reconocido la voz de Dios?
Entonces, ¿dónde podemos buscar las palabras del Espíritu Santo a las iglesias? De hecho, el Señor ya ha regresado, pues es Cristo de los últimos días, Dios Todopoderoso, y se hecho carne como el Hijo del hombre en China para realizar la obra, ha publicado todas las verdades para la purificación y la salvación de la humanidad, ha llevado a cabo la obra del juicio a partir de la casa de Dios, terminó la Era de la Gracia, y abrió la Era del Reino. Ahora el evangelio del Reino de Dios ya se ha extendido al Occidente, la Palabra de Dios ya se ha traducido a más de veinte idiomas y se ha publicado en Internet para que toda la humanidad lo busque y lo investige, lo que significa que realmente se ha cumplido la profecía de la Biblia. “Porque así como el relámpago sale del oriente y resplandece hasta el occidente, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:27). En los últimos días, Dios Todopoderoso reveló los misterios de los seis mil años de obra de Dios, nos expuso las raíces que pecamos contra Dios y también nos señaló el camino hacia la purificación y la salvación, estas verdades son luz verdadera, que brilla directamente del este al oeste. Leamos algunos párrafos de las palabras del Dios Todopoderoso y escuchemos si estas palabras son realmente la verdad, si son realmente la voz de Dios.
Dios Todopoderoso dice: “Durante los muchos años de Mi obra, el hombre ha recibido mucho y ha renunciado a mucho, pero insisto en que el hombre no cree verdaderamente en Mí. Esto se debe a que el hombre reconoce que soy Dios solamente con sus labios, pero no está de acuerdo con la verdad que Yo hablo, y practica aún menos la verdad que le exijo. Es decir, el hombre sólo reconoce la existencia de Dios, pero no la de la verdad; el hombre sólo reconoce la existencia de Dios, pero no la de la vida; el hombre sólo reconoce el nombre de Dios, pero no Su esencia. Debido a su fervor, el hombre se ha convertido en un ser abominable para Mí. El hombre sólo usa palabras agradables al oído para engañarme, pero nadie me adora con un corazón sincero. Vuestras palabras contienen la tentación de la serpiente; y aún peor, son extremadamente soberbias, una verdadera proclamación del arcángel. Es más, vuestras acciones están desgastadas y harapientas hasta un grado deplorable; vuestros deseos desmesurados e intenciones codiciosas son ofensivas para los oídos. Todos os habéis convertido en polillas en Mi casa, objetos aborrecidos de los que hay que deshacerse. Porque ninguno de vosotros sois amantes de la verdad, sino que todos anheláis recibir las bendiciones, ascender al cielo y presenciar la magnífica imagen de Cristo ejerciendo Su poder en la tierra. Pero ¿os habéis puesto a pensar cómo alguien como vosotros, tan profundamente corrupto, y que no sabe en absoluto quién es Dios, podría ser digno de seguir a Dios? ¿Cómo podría ascender al cielo? ¿Cómo podría ser digno de contemplar la magnificencia, cuyo esplendor no tiene precedente?”
“El propósito de vuestra fe en Dios es usar a Dios para satisfacer vuestros objetivos. ¿Acaso no es esta otra evidencia más de vuestra ofensa contra el carácter de Dios? Creéis en la existencia del Dios en el cielo, pero negáis la del Dios en la tierra. Sin embargo, Yo no apruebo vuestras opiniones. Elogio sólo a los hombres que mantienen los pies sobre la tierra y sirven al Dios en la tierra, pero nunca a aquellos que jamás reconocen al Cristo que está en la tierra. No importa cuán leales sean estas personas al Dios en el cielo; al final, no escaparán de Mi mano que castiga a los malvados. Estos hombres son malvados; son los perversos que se oponen a Dios y que nunca obedecieron a Cristo con alegría. Por supuesto, entre ellos se encuentran todos los que no conocen a Cristo ni mucho menos lo reconocen”.
“Os digo, aquellos que creen en Dios por las señales son sin duda la categoría que sufrirá la destrucción. Los que son incapaces de aceptar las palabras de Jesús, que ha vuelto a la carne, son sin duda la progenie del infierno, los descendientes del arcángel, la categoría que será sometida a la destrucción eterna. Muchas personas pueden no preocuparse por lo que digo, pero aun así quiero decirle a cada uno de estos llamados santos que siguen a Jesús que, cuando lo veáis descendiendo del cielo sobre una nube blanca con vuestros propios ojos, esta será la aparición pública del Sol de justicia. Quizás será un momento de gran entusiasmo para ti, pero deberías saber que el momento en el que veas a Jesús descender del cielo será también el momento en el que irás al infierno a ser castigado. Ese momento anunciará el final del plan de gestión de Dios, y será cuando Él recompense a los buenos y castigue a los malos. Porque Su juicio habrá terminado antes de que el hombre vea señales, cuando sólo exista la expresión de la verdad. Aquellos que acepten la verdad y no busquen señales, y por tanto hayan sido purificados, habrán regresado ante el trono de Dios y entrado en el abrazo del Creador. Sólo aquellos que persisten en la creencia de que ‘El Jesús que no cabalgue sobre una nube blanca es un falso Cristo’ se verán sometidos al castigo eterno, porque sólo creen en el Jesús que exhibe señales, pero no reconocen al Jesús que proclama un juicio severo y manifiesta el camino verdadero de la vida. Y por tanto, sólo puede ser que Jesús trate con ellos cuando Él vuelva abiertamente sobre una nube blanca. Son demasiado tozudos, confían demasiado en sí mismos, son demasiado arrogantes. ¿Cómo puede recompensar Jesús a semejantes degenerados?”
Después de leer las palabras de Dios Todopoderoso que juzga y expone al hombre, creo que todos los que tengan un corazón y un espíritu podrán sentir la autoridad en Sus palabras, y ver la manifestación del carácter justo de Dios. La palabra de Dios Todopoderoso revela nuestro odio hacia la verdad, nuestra codicia, deshonestidad, arrogancia y demás caracteres corruptos, y nuestro erróneo punto de vista de creer en Dios. En el pasado, creíamos que sólo con trabajar duro, renunciar todo y sufrir o pagar un precio, era amar a Dios. Al recibir el juicio de la palabra de Dios, nos hemos dado cuenta de que nuestro carácter es demasiado arrogante, cuando la aparición y la obra de Dios no están en absoluto en sintonía con nuestras ideas, definimos la obra de Dios con imaginaciones y nociones de las personas. También podemos ver, que nuestra creencia en Dios está adulterada, creemos en Dios no para obtener la verdad, y devolver el amor a Dios, sino para ser bendecido, evitar los desastres y entrar al reino de los cielos. Aunque estemos dispuestos a ofrecernos a Dios, no le obedecemos, ni le amamos de verdad, cuando nos bendice, estamos dispuestos a ofrecernos, pero cuando nos llega la tribulación y nos pone a prueba, involuntariamente nos quejamos y culpamos a Dios, incluso dudamos de Dios, negamos a Dios. Sin este juicio por la palabra, no tenemos ni un poco de auto conocimiento, hasta elogiamos a nosotros mismos, pensamos que ya somos amantes de Dios, que ya obedecemos a Dios, y que cuando el Señor regrese podremos ser arrebatados directamente al reino de los cielos. Pero al aceptar el juicio de la palabra de Dios, hemos sentido que Dios es demasiado santo, demasiado justo, creer en Dios no para obtener la verdad y deshacerse de los pecados sino para la bendición y gracia, esto es utilizar a Dios, es ofender el carácter de Dios, nunca más presumiremos de que obedecemos a Dios, sino que somos demasiado corruptos y que debemos apresurarnos a buscar la verdad, rebelarnos contra la carne, y librarnos del carácter corrupto. Al mismo tiempo hemos entendido la buena intención de Cristo de los últimos días en declarar la verdad y juzgar al hombre, aunque las palabras de la obra del juicio son muy severas, pero todo es para que reflexionemos de nosotros mismos, hasta lograr un verdadero remordimiento, dentro del carácter justo de Dios engloba la misericordia de Dios al hombre. Si no experimentamos el juicio de Dios nunca entenderemos lo profundo que Satanás nos ha corrompido, nunca conoceremos que el juicio de Dios y Su majestuosidad no se pueden ofender, ni tampoco tendremos corazón de temer a Dios, nunca escaparemos de la esclavitud del pecado, ni tampoco ser hombres que obedezcan verdaderamente a Dios. Si no fuera por la publicación de la palabra de Dios encarnado, ¿quién puede mostrar el carácter santo, limpio y justo que no se puede ofender de Dios? ¿Quién puede hablar y juzgar para revelar nuestra esencia corrupta? Todas las verdades emitidas por Dios Todopoderoso en los últimos días del juicio para purificar al hombre, revelando completamente la identidad y el estatus de Dios, lo que para el hombre es juicio, condenación, purificación y salvación. En los últimos días, Dios buscará a las personas que anhelan Su aparición con la palabra antes del desastre. Al igual que en la era de Noé, Dios también le ordenó a Noé que predicara el evangelio para salvar a las personas antes del desastre. La familia de Noé, de ocho miembros, obedeció y entró al arca y finalmente sobrevivieron, y aquellos que no lo creyeron sin ver los hechos fueron destruidos por el diluvio. Y en los últimos días, aquellos que sean juzgados por las palabras de Cristo en los últimos días tendrán un cambio purificado, y serán convertidos por Dios en vencedores antes del desastre y serán llevados a la próxima era por Dios con las bendiciones de Dios. Después de que Dios haya hecho un grupo de vencedores, Dios derribará el gran desastre para recompensar el bien y castigar el mal, se aparecerá en una nube abiertamente a las personas. Aquellos que solo esperan que el Señor descienda sobre una nube, y niegan a aceptar la obra secreta de Dios serán castigados en el desastre, llorarán y rechinarán los dientes. Esto cumple la profecía de la biblia “Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre; y entonces todas las tribus de la tierra harán duelo, y verán al Hijo del Hombre que viene sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria” (Mateo 24:30).
Entonces ¿cómo deberíamos de tratar la obra de Dios en los últimos días para armonizar con la voluntad de Dios? Dios Todopoderoso dice: “El regreso de Jesús es una gran salvación para aquellos que son capaces de aceptar la verdad, pero para los que son incapaces de hacerlo es una señal de condenación. Debéis elegir vuestro propio camino y no blasfemar contra el Espíritu Santo ni rechazar la verdad. No debéis ser personas ignorantes y arrogantes, sino alguien que obedece la dirección del Espíritu Santo, que anhela y busca la verdad; sólo así os beneficiaréis. Os aconsejo que andéis con cuidado por el camino de la creencia en Dios. No saquéis conclusiones apresuradas; más aún, no seáis despreocupados y descuidados en vuestra creencia en Dios. Deberíais saber que, como mínimo, los que creen en Dios deben ser humildes y reverenciales. Los que han oído la verdad pero la miran con desdén son insensatos e ignorantes. Los que han oído la verdad, pero sacan conclusiones precipitadas o la condenan a la ligera, están asediados por la arrogancia. Nadie que crea en Jesús es apto para maldecir o condenar a otros. Deberíais ser todos racionales y aceptar la verdad. Quizás, habiendo oído el camino de la verdad y leído la palabra de vida, creas que sólo una de cada 10.000 de estas palabras está en sintonía con tus convicciones y con la Biblia, y entonces deberías seguir buscando en esa diezmilésima parte de esas palabras. Sigo aconsejándote que seas humilde, no te confíes demasiado y no te exaltes mucho. Con esta exigua reverencia por Dios en tu corazón, obtendrás mayor luz. Si examinas detenidamente y contemplas repetidamente estas palabras, entenderás si son o no la verdad, y si son o no la vida”. La palabra de Dios Todopoderoso está llena de las expectativas de Dios a nosotros, Dios espera que cuando enfrentemos a la obra de Dios en los últimos días, primero no debemos de definir en nuestras nociones e imaginaciones, sino ser un humilde buscador de la verdad. Escuchar la palabra de Dios, buscar si es o no la voz de Dios, solo de esta manera podemos recibir la aparición del Señor, sino lamentaremos y perderemos la oportunidad de recibir al Señor después de tantos años de creer en Dios.
Recomendación: Profecias del apocalipsis
Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.